LA FACHADA VENTILADA

LOS PRINCIPALES MOTIVOS PARA ELEGIRLA

La creciente necesidad de un desarrollo sostenible como solución a la crisis medioambiental, la reducción de los consumos energéticos en la construcción, la aplicación de nuevas tecnologías de construcción y la necesidad de recalificar el patrimonio existente, encuentran en la fachada ventilada una respuesta segura.
La fachada ventilada, en su definición más rigurosa, es una pantalla construida en seco en la que el espacio entre revestimiento y pared se diseña de modo que el aire pueda fluir de forma natural por "efecto chimenea". En nuestra interpretación va más allá de un simple diafragma interior-exterior, sino que se constituye en filtro dinámico, expresión de un "lenguaje" arquitectónico capaz de responder correctamente a las exigencias sostenibles de bienestar y confort.

VENTILACIÓN La característica que, desde siempre, distingue el "sistema de fachada ventilada", es la creación de una cámara de aire en movimiento entre la pared y el paramento externo de revestimiento.
A partir de decenios de análisis del comportamiento de la cámara de ventilación, adoptamos el principio de la fachada de juntas abiertas, donde la ventilación, más regular y continua con respecto a la de las juntas cerradas, regula en modo excelente el ciclo de calentamiento-refrigeración del aire.
Esta solución, además, asegura una dinámica en la circulación del aire que no se ve obstaculizada por condicionamientos arquitectónicos.
PROTECCIÓN CONTRA
LOS AGENTES
ATMOSFÉRICOS La Fachada Ventilada es un sistema protector de las paredes altamente transpirable que permite que la humedad producida dentro de la vivienda se difunda hacia el exterior, sin encontrar obstáculos o barreras, manteniendo tanto los muros como los paneles aislantes en las condiciones ideales para el aislamiento y la conservación.
La Fachada Ventilada constituye una pantalla de protección termo-higrométrica que limita en gran medida la entrada de los agentes atmosféricos y contaminantes que son causa de degradación de las edificaciones.

PROTECCIÓN TÉRMICA La Fachada Ventilada es una solución eficaz para garantizar el cumplimiento de los estándares de eficiencia energética, tanto en fase de construcción como en caso de reacondicionamiento.
La Fachada Ventilada crea un auténtico "escudo térmico" en la edificación sobre la que se aplica, protegiéndola del calor, gracias también a la circulación constante de aire a temperatura ambiente, que se desliza sobre la superficie externa del aislante.
Durante el verano, asegura el desfasamiento de la onda de calor: el calor penetra en el interior del alojamiento en forma reducida y en horas a las que la temperatura ambiente es menos alta.
Durante el invierno, aumenta el tiempo necesario para el enfriamiento de la pared.
PROTECCIÓN ACÚSTICA La Fachada Ventilada permite cumplir en modo eficaz con las normativas sobre el aislamiento acústico:
Dado que se trata de un sistema por capas, genera una mayor absorción del ruido y aporta un aislamiento continuo y sin interrupción que elimina fácilmente los puentes acústicos.
Una correcta elección del material aislante y un correcto diseño del cierre pueden proporcionar al edificio un alto grado de aislamiento acústico dentro de una economía de construcción.